Inspirada en las clásicas sillas con domo de mimbre o madera que adornaban la entrada de las casas antiguas en la campiña, la Domo Chair 658C de POLaRT crea la sinergia perfecta entre el mundo exterior y el interior, con un diseño que resguarda la intimidad sin ser tímido, y que remite a una disfrutable nostalgia sin dejar de ser moderna, vibrante y protagonista.
Entre sus muchas virtudes, esta pieza de diseño destaca por su versatilidad para interiores y exteriores, y viene en una presentación de domo cerrado, ideal para el invierno y los días de viento, y una de domo abierto, perfecta para sentir la brisa y los rayos del sol sin salir del pequeño santuario que crean sus formas suaves y elípticas.
Esta silla fue concebida para propiciar un diálogo íntimo y cercano con uno mismo o con un interlocutor cercano, para enmarcar conversaciones en las que los sueños, la familiaridad y el cariño se hacen presentes, para leer un buen libro o disfrutar una tisana mientras el tiempo parece detenerse.
Los accesorios perfectos para esta pieza de colección son una mesa lateral y una otomana para descansar las piernas. Con estos tres elementos y tu toque personal, se le puede dar vida a cualquier rincón y convertirlo en un sitio de experiencias inolvidables.
Son pocas las piezas de mobiliario que se convierten en toda una experiencia para los sentidos, pero nuestro Domo Chair no se limita a una experiencia visual y estética, es también una invitación a la sensualidad del tacto con sus materiales de alta calidad y su elaboración pensada para la comodidad.
Domo Chair de POLaRT es mucho más que un sillón cómodo, se trata de una declaración de principios, de un recordatorio de lo que deseamos para nosotros mismos y para nuestros seres queridos. Es una ruptura definitiva del pragmatismo en favor de lo emocional, lo humano y lo reconfortante.
En POLaRT, el diseño, la funcionalidad, la moda y el arte son elementos que se conjugan en perfecta sinergia para que cada creación sea lúdica, expansiva y elegante. Nuestra filosofía de atención a los mínimos detalles nos permite honrar el pasado y el futuro para disfrutar al máximo el presente.
Un mueble con identidad y personalidad vibrante que nos remite a un pasado de lujo y excentricidad. No es solo un sillón, es un símbolo de resistencia frente a lo impersonal, y una declaración del estilo de vida que mereces.